sábado, 22 de agosto de 2015

Huella de Trabajo


 


TAMBO DE BRONCE
 
La imagen corresponde al ingreso del Tambo de Bronce sito en calle Puente Bolognesi Nº 333, a dos cuadras de la Plaza de Armas de Arequipa, y juntos con los Tambos La Cabezona, El Solar y Matadero, son los más representativos de la Ciudad de Blanca.
En el Tawantinsuyo los Tambos eran lugares donde se almacenaban alimentos y demás bienes para la atención de la población incaica en épocas de guerras, escasez y para la asistencia en casos de desastres naturales.
En la época colonial, en los centros urbanos, se llamó tambos a los sitios donde los arrieros alojaban sus mercancías que luego ponían al comercio. Ahora son barrios donde viven familias que le dan vida al Centro Histórico de Arequipa.
Tales Tambos fueron restaurados –buena parte- en la Gestión Municipal de Yamel Romero Peralta (2003 – 2006), en donde fuimos parte del Equipo de Funcionarios Ediles; y con el importante apoyo de AECI – Agencia Española de Cooperación Internacional.

Elvira de la Puente Haya

 
MEMORIAS DE ELVIRA

El viernes tres de agosto de 1979, la Quinta Mercedes de Vitarte, amaneció envuelta en una tristeza y soledad infinitas. La noche anterior, a las 10.45, Victor Raúl Haya de la Torre había dejado de existir. Un paro cardíaco había puesto punto final al largo tiempo que pasó luchando contra el cáncer que lo aquejaba. Aún cuando la enfermedad estaba ya muy avanzada en su cuerpo, él decía "aquí estoy: fuerte y sano". En una carta había escrito una vez a un amigo: "Si algún día me enfermo, será de un ataque de fe".

"Haya de la Torre murió anoche de paro cardíaco", decían las primeras planas al día siguiente. "El Comercio", aunque no compartía las ideas políticas de Victor Raúl, cerraba su editorial diciendo "Se ha cerrado una página que contiene medio siglo de la historia de nuestro país. Medio siglo de la vida de un hombre que se consagró a un ideal. Ha muerto un peruano universal, sus ideas son ya patrimonio de la cultura occidental." "Haya de la Torre nunca abdicó de sus ideales", decían incluso los diarios que nunca habían simpatizado con "Tristeza y soledad en Villa Mercedes", decía "La Prensa". "Un viejo guardián de Vitarte no pudo contener gruesas lágrimas que rodaron por su rostro, al contemplar la profunda y lacerante soledad en que ha quedado la quinta."

Villa Mercedes, el tranquilo hogar donde vivió su última década, no era propiedad de Victor Raúl, sino de su prima hermana, Mercedes de la Torre de Ganoza, hermana del pintor Macedonio de la Torre. Haya de la Torre no era dueño de ningún inmueble, exceptuando su propia tumba, que él mismo adquirió en vida, en Trujillo, junto a las tumbas de sus padres. No dejaba ninguna herencia, nunca tuvo una caja fuerte, ni una chequera, ni más dinero del que llevaba en el bolsillo. No le interesaba la propiedad material, y era enemigo de las deudas.

Después de sus actividades en el Partido, Victor Raúl llegaba a Villa Mercedes casi siempre bastante después de la media noche. Era conocido por trabajar sin descanso y dormir un promedio de cinco horas al día. "Ya dormiré cuando me muera", decía. Y lo poco que ganaba, con sus libros, escritos y conferencias, iba directamente a su trabajo, a sus obras, a su gente que se reunía en la Casa del Pueblo y que él quería como si se tratara de su propia familia, a "su" Comedor, a la Fundación para la Navidad del Niño del Pueblo, a su lucha. Su talento, su fuerza y su fé, eran su único capital.

 



El retrato de Vitarte


 



HAYA LUCHADOR 

Este testimonio fotográfico, pertenece al archivo de Miguel Pasquel y le fue entregado por Julio Portocarrero a Rafael Tapia, durante el trabajo de recopilación oral de éste para el libro del primero: “Sindicalismo Peruano 1911-1930”. En la foto, tomada en la Fiesta de la Planta, celebrada en Vitarte, en Enero de 1924, aparecen reunidos miembros de la Universidad Popular Gonzales Prada, que años más tarde serían fundadores del Socialismo y del Apra. En la fiesta de ese año, se recordó a Haya de la Torre, deportado en 1923. Los participantes se fotografiaron en torno a un retrato de Haya de la Torre.
En cuclillas, Pedro Barrios, Alberto Benites, el retrato de Haya y Fernando Borjas (en baston). Sentados: Oscar Manuel Medina, Lorenzo Bartra, Enrique Reyes, Manuel Seoane, Oscar Herrera (Nuevo Rector de la UPGP), José Carlos Mariategui y Luis Bustamante.
Parados, en primera fila: Miguel Rodriguez (de saco blanco), s/identificar, Enrique Cornejo Kosler (cubriéndose con su sarita), David Tejada, s/i, Jacobo Hurwitz, s/i y Francisco Yarqlequé. Detrás, entre Cornejo y Yarleque, Manuel Pedraza. Al fondo, el estandarte del Sindicato Textil Vitarte y el de la Federación de Conductores y Motoristas.



 

 





 





 

 


 

CEPLAN


8.- Testamento Político e Ideológico

El año 1965 Haya se sometió a una operación quirúrgica en la Clínica de la Universidad de Hamburgo – Alemania, considerada de alto riesgo, previendo lo peor, escribió dos cartas dirigidas a los dirigentes y militantes del Aprismo, en ellas invocaba a los compañeros: preservar la unidad del Partido de los Trabajadores; continuar con la acción social a favor de los pobres (comedor del pueblo incluida su porción de leche, ahora realizada por el Estado con los comedores populares y comités de vaso de leche, la Clínica Odontológica Víctor Raúl Haya de la Torre, también asumida por el Estado y otras entidades privadas y sociales); llevar a cabo la gran transformación integral sin precipitaciones ni violencia; no preguntar cuánto cuesta hacer una obra, sino, cuánto cuesta no hacerla.

También hizo recomendaciones: a la Célula Parlamentaria Aprista, estudiar y trabajar bien las leyes propuestas; seguir con la Navidad del Niño del Pueblo; con el Día de la Fraternidad; y su mensaje final de no aceptar ningún beneficio personal por parte del Estado, en otras palabras de no aprovecharse egoísta ni indebidamente de los cargos y recursos públicos, en esto Haya fue un ejemplo, desgraciadamente no seguido por algunos vividores del Estado.

En su último discurso pronunciado el 28 de julio de 1978 como Presidente de la Asamblea Constituyente, nos dejó una síntesis de la doctrina aprista: volvió a propugnar la gran transformación, construir la democracia de pan con libertad, tener como ineludibles deberes la cooperación patriótica y ser paradigma de limpieza, de la confrontación de ideas ir al consenso político, hacer realidad los derechos humanos, practicar la democracia municipal y el descentralismo, propiciar verdadera y urgentemente la educación de calidad en los niños y jóvenes, finalmente repensar el Congreso Económico Nacional como organismo técnico, planificador y concertador.

El Centro Nacional de Planeamiento Estratégico – CEPLAN, es una versión actualizada e introductoria al Congreso Económico Nacional, el mismo debe ir consolidándose y creciendo hasta alcanzar la condición de Poder del Estado. También los procesos de Presupuesto Participativo y los Consejos de Coordinación Regional y Local, son acciones que están dentro de los lineamientos de desarrollo integral, concertado y democrático propugnado por el Congreso Económico Nacional.

Legado


7.- Haya de la Torre y Alan García
Mi generación creció, leyendo y escuchando a mucha gente, hablar mal de Haya: que se ha derechizado, que se ha apartado de sus principios primigenios, que se ha desviado de sus orígenes revolucionarios; hoy reconocen en Haya su lealtad, consecuencia y magisterio. En la actualidad algo parecido dicen de Alan García: que no cumple sus promesas, que está gobernando para los ricos, que está vendiendo el país a las transnacionales, que es el continuador del neoliberalismo, que ha pactado con el fujimorismo; nada de ello es cierto, pero, no podemos negar que importantes sectores del país así perciben el Gobierno Aprista; lo más preocupante es que el Partido no ha hecho nada por revertir esta situación, cuando hay muchos aspectos positivos reales, recientes, evidentes y verificables.
Lo que eclipsa este buen gobierno, muchísimo mejor que el anterior, son los hechos de corrupción: petroaudios, Crousillat, COFOPRI, Banco de Materiales, cobros indebidos por “despido arbitrario”, falsificación de resoluciones para acceder a la célula viva; que el pueblo no le perdona al APRA, y que a miles de apristas nos avergüenza y amarga; pero, es el propio Presidente Alan García el que ha salido al frente de estos actos dolosos y dispuesto las denuncias penales con orden de detención (petroaudios y COFOPRI), la destitución de los cargos públicos (Crousillat), e imponiendo el costo político con la renuncia de sus puestos (Ministros y Viceministros), es decir, no hay ni hubo impunidad, al contrario hay deslinde y repudio a la corrupción, cosa que no sucedía en los anteriores gobiernos, pero, eso teniendo ojos no ven, teniendo oídos no oyen.
Incluso la incapacidad de los gobiernos regionales y locales en la prevención de conflictos sociales, en la prestación de servicios y ejecución de obras, también se lo endilgan al gobierno nacional; aquí nuevamente falla el Partido al no exigir a los gobiernos subnacionales la atención a las expectativas de los pueblos del país, cuando se tiene cuadros políticos y técnicos capaces, pero, no son convocados o no son escuchados.
El APRA no es neoliberal porque no hemos privatizado ni privatizaremos ninguna empresa pública; porque hemos mejorado los programas sociales y reducido la pobreza; porque se ha dado agua potable, desagüe, electricidad, telefonía a los pobres que nunca antes tuvieron; porque se ha empezado a mejorar la calidad de la educación pública: capacitando a los docentes, reconstruyendo las Instituciones Educativas emblemáticas, creando el Colegio Mayor Presidente de la República, entregando una laptop a cada niño y niña; incorporando a miles de trabajadores de services a planillas; posibilitando el retorno de miles de jubilados de las AFPs. al Sistema Nacional de Pensiones; los gobiernos regionales y locales, ahora tienen más recursos que el gobierno nacional, eso es descentralización; etc. Tampoco ha pactado con el fujimorismo, durante el gobierno de Alan García, el autócrata fue extraditado, procesado y condenado a 25 años de cárcel.
Acusar a Alan García de neoliberal por el fuerte énfasis puesto en la inversión privada nacional y extranjera, por llevar a cabo la suscripción de Tratados de Libre Comercio, con Estados Unidos, China Comunista, Unión Europea y otras economías, es una insensatez. El desarrollo requiere de inversión privada productiva, los TLC van a permitir que los productos, bienes y servicios hecho por peruanos ingresen a los megamercados de las economías desarrolladas sin aranceles, generando trabajo y riqueza para los que no la tienen; los TLC son una medida antimperialista, pues, con ello buscamos un equilibrio en las relaciones comerciales con los países desarrollados, propiciamos el dinamismo de las pequeñas y medianas empresas, además, con la competencia favorecemos a los consumidores, al tener varias opciones entre las cuales elegir.