miércoles, 24 de febrero de 2016

Una foto para pensar



Iluminado Kim

El retrato del fundador de Corea del Norte, Kim II-Sung, decora un edificio en la capital de Pyongyang.

La lección de Juliaca


 
Los días 22, 23, 24, y 25 de Octubre de 2013, la ciudad de Juliaca protagonizó una paralización total al cien por ciento, en protesta contra la Municipalidad Provincial de San Román – Juliaca (por haber incrementado los tributos ediles), demandando la “renuncia” del Alcalde Prof. David Maximiliano Mamani Paricahua.

Paro en pleno aniversario.-

Dicho paro se realizó en plena fecha del 87 Aniversario de creación política de Juliaca (24 de octubre); por lo que no se llevaron a cabo el Programa de Festejos, pero, el día central, los vecinos y vecinas huelguistas, se concentraron en la Plaza de Armas, izaron las Banderas y cantaron los Himnos, así celebraron el Día de Juliaca. Bosquejamos algunas conclusiones:

Una huelga vecinal.-

En primer lugar,  esta paralización ha sido liderada y llevada a cabo por las organizaciones vecinales aglutinadas en la Central Única de Barrios de Juliaca, es decir, no ha sido organizada por gremios ni sindicatos como tradicionalmente sucede.

Mesa de Diálogo, inicio de la solución.-

En segundo lugar, la paralización –como nunca- fue total al cien por ciento, empezó con carácter de indefinida, pero, los dirigentes barriales, con buen tino dieron paso a una tregua, surgiendo la Mesa de Diálogo, conformada por representantes de la Municipalidad y de la Central de Barrios.

Huelga contra el municipio.-

En tercer lugar, el paro de una importante ciudad como Juliaca, no fue contra el Gobierno Central ni contra el Poder Ejecutivo ni contra el Poder Legislativo, como acontece normalmente, y así ha sido siempre en las movilizaciones de los últimos diez años en nuestra Patria. Recordemos lo del moqueguazo, tacnazo, baguazo y la protesta aymara del sur de Puno, etc.

Multiplicidad de conflictos sociales.-

En cuarto lugar,  se está dando un nuevo tipo de conflictos sociales, de carácter estrictamente locales, donde el centro del problema de la convulsión son las municipalidades, sobre todo, los alcaldes. Fenómenos políticos locales no estudiados, por ende, no prevenidos, por falta de Entidades Locales en gestión y prevención de conflictos sociales.

Alcalde vacado, nuevamente electo.-

En quinto lugar, lo curioso del evento político de Juliaca, es que su actual Alcalde, ya lo fue en el anterior período (2007 – 2010), en donde fue vacado por sus propios regidores; volviendo a participar como candidato en las últimas elecciones ediles, ganando otra vez. Y en el presente período municipal, ya prácticamente ha sido “licenciado” por el pueblo juliaqueño.

El reto es tener buenas relaciones a todo nivel.-

En sexto lugar, el hecho que la autoridad municipal mantenga buenas relaciones con los medios de comunicación, con las otras entidades públicas de los otros Poderes del Estado (Poder Judicial, Ministerio Público, Ministerio del Interior, etc.), no lo hace inmune a las protestas.

No es suficiente hacer obras.-

En sétimo lugar, creer que con hacer obras, el pueblo va a dejar pasar por alto situaciones de ausencia de transparencia, indicios de corrupción, la burla por el incumplimiento de promesas, gestos de prepotencia, actos de nepotismo, y otras infracciones. Es un grave error.

El diálogo es la base de la nueva democracia ciudadana.-

El malestar se fue gestando desde el primer día de la gestión edil del Alcalde, al no dialogar con los vecinos, al no atender sus pedidos, al no conceder audiencias a las organizaciones populares. Aquí tienen una enorme responsabilidad los Regidores y Regidoras, quienes al no conocer ni cumplir con sus atribuciones y obligaciones, han contribuido al estallido social de Juliaca.

Gobernar con transparencia y participación.-

La principal lección: no es suficiente con hacer obras civiles y con pompa inaugurarlas, para ganarse aplausos. Sino, gobernar con transparencia, con honestidad, con planificación, con participación, dialogando permanentemente con el pueblo, caminando por las calles, evaluando sus peticiones, hablando la verdad. Esa es la lección de Juliaca, no lo olviden.

(éste artículo fue publicado en noviembre de 2013, en el diario Sin Fronteras de Arequipa).    
 
Beto Lajo