viernes, 6 de noviembre de 2015

Burocratismo : gobernabilidad y crecimiento


Las trabas burocráticas son los actos y hechos de la administración pública que hacen que los trámites administrativos sean demorosos, engorrosos, complicados y costosos; las cuales, tienen efectos nocivos para la gobernabilidad política y crecimiento económico de un país, de una región o de una localidad.

Contra las trabas burocráticas hay que aplicar una política de Simplificación Administrativa a todo nivel, nacional, regional y local, la misma se sustenta en principios de veracidad, hay que creer en la declaración del ciudadano, de fiscalización posterior, sustituyendo a la fiscalización previa.

El TUPA – Texto Único de Procedimientos Administrativos, es el documento de gestión que cuando apareció sirvió para en un solo instrumento se compendie todos los procedimientos habidos y a realizarse en una entidad pública; en la actualidad, no solo debe ser un compendio, sino, expresión de simplificación contínua.

El Silencio Administrativo Positivo, es la aprobación de lo solicitado, peticionado por el ciudadano al organismo público, si es que vencido el plazo para pronunciarse no lo hace, y para ejercer su derecho obtenido, es decir, para operar el silencio administrativo positivo, tiene que el ciudadano efectuar una declaración jurada en formato proporcionado por la entidad.

A tales preceptos de simplificación, compendio y silencio positivo, tienen que ceñirse todo el aparato estatal nacional y subnacionales (Gobiernos Locales y Gobiernos Regionales), pero, ello no está ocurriendo, sino veamos: de 2184 instituciones del Estado, sólo 575 han simplificado sus procedimientos; de 1641 municipalidades distritales, apenas 274 han actualizado sus tupas.

Las trabas burocráticas socavan la gobernabilidad, pues, fomentan la ineficiencia, propician la corrupción, sabotea la solución a los problemas, frustran los derechos y aspiraciones de los ciudadanos; de ahí, los altos índices de desaprobación de las autoridades de los Poderes del Estado, como de los Gobiernos Regionales y Gobiernos Locales.

Por otro lado, las trabas burocráticas impiden el crecimiento económico en un 1.5 % al año, obstruyendo la inversión anual de un mil millones de dólares, por ende, imposibilita la creación de cincuenta mil puestos de trabajo; en consecuencia, las trabas burocráticas obstaculizan la reducción de la pobreza.

¿Qué proponemos? Actualización permanente del TUPA, aplicación y cumplimiento del Silencio Administrativo Positivo, para ello, los Gobiernos Locales y Regionales deben constituir Comisiones de Trabajo de Desburocratización, y las Universidades deben dictar cursos-talleres de Simplificación Administrativa.
Publicado en el diario La Voz de la Corporación Periodística de El Pueblo de Arequipa-
Beto Lajo