Caso Rómulo León y el cáncer de la corrupción.

 

Existe un error de apreciación en el pedido del Sr. León al querer reincorporarse al Partido Aprista, basado en que la justicia lo ha absuelto por el caso PETROAUDIOS, Rómulo León (y otros) fue expulsado del APRA luego del 1er gobierno de Alan García y, se le reincorporó sin que haya realizado militancia activa, hoy pretende nostrarsae como inmaculado. Pero, para el caso del faenón, siempre la prensa antiaprista (o sea todos los medios de comunicación nacional y el periodismo mayoritario) usaron la plantilla EX MINISTRO APRISTA en cada noticia que daban. Nunca usaron esos términos con ALAN WAGNER  cuando nos representaba en La Haya. 

Creo que Rómulo ha sido y seguirá siendo aprista, un católico no deja de serlo porque lo excomulguen, pero en la organización partidaria no tiene cupo, es más, es una vergüenza para nosotros el que haya pertenecido. 

También creo que fue un excelente dirigente, un cuadro, pero podemos poner un santo en un ministerio y no sabremos si cederá a las tentaciones de tanta burocracia corrupta, que le muestren lo fácil que es llevarse el dinero con impunidad, quizá lo que más funcione es el NO SEAS ZONZO.

Supongo que un caso de esos ha sido el de Facundo Chinguel, un entusiasta compañero, dirigente juvenil, no con mucha proyección (lo llamaban el burro), que habría aceptado la oportunidad de llevarse unos soles ilícitamente, cuando se los pusieron en los bolsillos. 

La enfermedad de la corrupción, corre por los tejidos de la sociedad, está impregnado en cada célula de cada peruano, contra eso no hay vacuna, solo queda apelar a los principios éticos, a los valores que nos impartían en la casa y en la escuela. Lo que si se puede hacer, es que haya más capacitación a los jóvenes de partidos políticos y colectivos sociales, no solo en lo técnico como el SIAF (sistema integrado de administración financiera) SNIP (sistema nacional de inversión pública), etc. sino, hay que penetrar el alma del joven, enseñarle otra vez a través de su rebeldía (release a José Ingenieros: Fuerzas Morales) que es su deber transcender en la historia, que está llamado a hacer patria. El mayor daño lo hizo el fujimorismo, instando al individualismo como único camino al progreso personal.    

Si todo se hace por amor a la causa, si se entrega el trabajo por la sociedad como un servicio en pago a Dios de la vida misma, todo el bienestar material llegará por añadidura. Tendremos jóvenes alegres, entusiastas, fuertes mentalmente, capaces de tomar riesgos en la vida, de estudiar y trabajar en lo que es su afición y aptitudes, solo así tendremos una burocracia que trabaje en equipo en bien de los intereses nacionales.

Qué pena da ver las redes sociales (con chicos de entre 14 a 35 años) infestadas de insultos, odio, amargura, desilusión y desesperanza. 

De otro lado, y mientras ese proceso largo de recomposición de la salud de la sociedad sucede, la Contraloría debiera ser más audaz en el control de la cosa pública, SERVIR debiera poner a los Gerentes Generales y Jefes de Logística de todos los gobiernos regionales, las compras del Estado debieran ser por subasta inversa, Los proveedores deberían tener sus precios pre publicados, etc. 

Con convicción pero sin fanatismo, invito a los jóvenes a unirse al APRA,  a estudiar y trabajar en pos de la justicia social, que no es otra cosa que lograr la igualdad de oportunidades para progresar en la vida, eso se logra alimentando y protegiendo a la mujer embarazada, los debidos cuidados a los niños de 0  a 03 años, nido y jardín obligatorio con estimulación de 04 a 06 años, primaria y secundaria en verdad gratuita y de calidad, con profesores bien pagados y que tengan dominio de las TICs (tecnología de la información y la comunicación). 

POR UN GOBIERNO DE ALIANZA POPULAR, ¡QUE VIVA EL PERÚ!.

 

 

Juan Almonte