El Apra partido de la democracia

DEMOCRACIA ES DIÁLOGO, CONFRONTACIÓN Y CONSENSO

La gobernabilidad es tal vez el factor más importante para erradicar la pobreza y promover el desarrollo –sentenció Kofi Annan, ex Secretario General de la ONU- y se hará mejor en democracia, y ésta es diálogo, confrontación y consenso. A fin de tener claros los conceptos mencionados, vamos a exponer sus significados:

Democracia.- Doctrina política favorable a la intervención del pueblo en el gobierno. Predominio del pueblo en el gobierno político de un Estado (Diccionario de la Lengua Española – Real Academia Española, vigésima segunda edición, t. 7, p. 503). Diálogo.- Plática (conversación) entre dos o más personas, que alternativamente manifiestan sus ideas o afectos (ídem, t. 7, p. 551). Confrontación.- Careo (poner a una o varias personas en presencia de otra u otras, con objeto de apurar la verdad de dichos o hechos) entre dos o más personas (ídem, t. 6, p. 421). Consenso.- Acuerdo producido por consentimiento (de consentir, permitir algo o condescender en que se haga) entre todos los miembros de un grupo o entre varios grupos (ídem, t. 6, 426).

Entonces diálogo, confrontación y consenso es la tríada democrática, sin los cuales –valga la redundancia- no hay democracia, es decir, ésta es un permanente y constante proceso de diálogo, confrontación y consenso. Por lo tanto, la dinámica de la democracia empieza con el diálogo, prosigue con la confrontación y culmina con el consenso; y así sucesivamente. Basta que falle o se omita una de estas fases para que no haya democracia o sea defectuosa o no de resultados. Tampoco se puede eliminar o amputar una de estas partes, por ejemplo, no podemos estancarnos en la confrontación y no llegar al consenso, eso es suicida; menos podemos iniciar el diálogo y cortarlo si surge alguna confrontación.

Por otro lado, no es razonable ni ético, decir “no nos ponemos de acuerdo, por ende, no se hace nada y que todo siga como está” ¡tampoco! En tal caso, es pertinente crear mecanismos y espacios de decisión, ya sea, audiencias públicas informativas, etc., donde se despejen dudas, se genere confianza y se garantice transparencia.

Actualmente, estamos asistiendo, a acontecimientos donde el diálogo es el mejor instrumento de acercamiento, entendimiento y de solución de problemas; por ejemplo, los diálogos dados entre: Barack Obama (EE.UU.) y Raúl Castro (Cuba), en la VII Cumbre de las Américas en Panamá, después de cincuenta años de pugnas ideológicas; Perú y Chile en la Alianza del Pacífico, a pesar de la nefasta Guerra del Pacífico; Pedro Cateriano (Presidente del Consejo de Ministros) y Alan García (Ex Presidente de la República), no obstante los veinte y cinco años de enconos políticos.

En nuestra provincia de Islay, también podemos y debemos ser otro ejemplo de diálogo por nuestro desarrollo integral, más aún, cuando hay grandes y sustanciales coincidencias, todos y todas: queremos preservar nuestro Valle de Tambo, nadie quiere que desaparezca; estamos comprometidos en cuidar el recurso hídrico, nadie acepta que se contamine; y anhelamos el “crecimiento económico, con justicia social y sostenibilidad ambiental”, nadie busca permanecer en el atraso, pobreza y desigualdad.

¡ Vayamos a la Mesa de Desarrollo ¡ Autoridades y sociedad civil, a plantear y exigir, -con sustento técnico, fundamento jurídico y respaldo institucional-, se otorgue a la provincia de Islay lo que se merece para el bienestar material y espiritual de su gente.

publicado en el mes de abril en Prensa Regional de Mollendo.

 

Beto Lajo